martes, 10 de noviembre de 2009

Ruta por la Sierra de Gata - 8 de Noviembre de 2009. (Gata-Acebo)




El domingo día 8 de Noviembre de 2.009, el Club de Montaña Valcorchero. Realizo una ruta por la Sierra de Gata, la cual fue desde el pueblo de Gata hasta el de Acebo. Durante el recorrido pudimos deleitar nuestras retinas con los paisajes que se nos presentaban ante nuestros ojos. Los cuales en parte se los expongo en una serie de instantáneas tomadas durante el recorrido.



Pero antes de pasar a exponer las fotografías, déjenme que les ubique donde se encuentra este precioso lugar de Extremadura. Por si algunos de los que puedan ver estas imagenes se animan y quieren ir a comprobarlo en directo.



La Sierra de Gata forma una separación natural de la Submeseta Sur y la Submeseta Norte. Es una de las comarcas de Extremadura, en el extremo noroeste de la provincia de Cáceres. Limita al Norte con la provincia de Salamanca, al Oeste con Portugal (Reserva Natural de la Serra da Malcata), al Este con las comarcas de las Hurdes, , de las Tierras de Granadilla y de las vegas del Alagón y al Sur, con la comarca de la Tierra de Alcántara.



Se trata de un territorio con diversidad de paisajes y flora. Tiene importantes recursos hidrográficos, con dos vertientes importantes: el río Arrago y el río Erjas. Su secular aislamiento. La han convertido en uno de los lugares más vírgenes de la Península en lo que se refiere a Naturaleza y autenticidad de las formas de vida rural.



El pueblo de Gata; Está ubicado al noroeste de la provincia de Cáceres, en el corazón de la Sierra de Gata. Tendida en la falda sur de las Jañonas (1.367 metros), coronada de robles, pinos, castaños y adornada por peñas de granito, emerge en medio de un mosaico de olivares por donde transcurre el río de la Rivera de Gata (el Arrago) con sus aguas limpias y cristalinas. Fue llamada Catóbriga por los romanos y Albaranes en tiempo de los árabes. La palabra Catóbriga significa (Gata), y tiene un origen claramente vetón puesto que el sufijo "briga" significa (Fortaleza). Por aquí pasaba la Vía Dalmacia, que aun ahora se puede recorrer durante varios kilómetros en el puerto de Castilla. El pueblo de Gata posee un gran patrimonio de su pasado histórico, el cual es muy extenso. Algunos de los más emblemáticos son: la iglesia de San Pedro (siglo XV y XVI), ermita del Cristo del Humilladero (siglo XVI), convento de Nuestra Señora de Monteceli (siglo XVI) y quizás el más conocido la Almenara.



La torre de la Almenara se encuentra en una de las zonas más escarpadas de Gata, al este de la localidad de Gata, y alejada de ella, poco más de media legua. En 1.212 Alfonso IX de León se la arrebató a los moros, junto con el castillo de Santibáñez, de donde dependía esta torre. Posteriormente, estas fortalezas fueron entregadas para su custodia a la Orden Militar de Alcántara. La torre ocupa el punto más alto del escarpado cerro. Es de planta pentagonal, hecha con piedra y cal, con sillares en sus cinco esquinas. Según consta en un escrito del 29 de Julio de 1.549, existía una barrera de piedra seca alrededor de la torre. Dentro del recinto, junto a las murallas, se encontraban las caballerizas, con dos habitaciones encima y la torre del homenaje, único resto persistente en la actualidad.´Aún perdura parte del baluarte redondo situado delante de la puerta. Desde aquí se accedía a la torre por una escalera de mano, a modo de puente levadizo, con el fin de facilitar su aislamiento y seguridad para la defensa.



Pueblo de Acebo; Está resguardado por el monte Jálama que tiene 1.492 metros de altitud. Tiene una flora muy variopinta que está compuesta entre otras planta por: el pino, el alcornoque, el castaño y el roble, así como la jara, el brezo, el madroño y la lavanda, olivo, vid y naranjo. A parte de su flora autoctona como el Loro del Becerril y el Mostajo de Acebo. Entre sus sitios de interés destaca la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles (siglo XVI) que se comenzó a construir en el siglo XV, la ermita del Cristo y la sinagoga judía. Existe también una ruta verde perfectamente señalizada para realizar el senderismo. Es el segundo en importancia en Extremadura. Uno de los caminos de la ruta conduce a la Cervigona, un salto de agua de más de 60 metros de altura. Para los amantes de los deportes de alto riesgo Acebo ofrece la posibilidad de practicar actividades como la espeleología en antiguas minas abandonadas de wolframio y de estaño. También se pueden practicar deportes como: escalada, senderismo, barranquismo, cicloturismo, etc.


Y después de la pequeña introducción, paso a exponer las fotografias.























Este hombre cada día nos agasaja con una


nueva pose. En esta parece ser que a la vez


que se ata las botas, esta apretando.


Y no precisamente los cordones.


















El mas mayor y el más joven del grupo de

este día (Julián y Jorge) "Hacia frio"




















¡Moncho! ¡Medijistes que no había cuestas!



















La escoba del grupo, con el pueblo de Gata al

fondo.



















La vieja cruz de Gago, vigila el camino

como eterno centinela.


















El grupo ascendiendo por la antigua calzada.


















Parte del grupo, cruzando el viejo puente

sobre el arroyo de San Blas.


















Otra perspectiva del puente.

















¡Esperarme! ¡No me dejéis solo!

















Curioso el puente.

















Entorno de la ermita de San Blas.
















Ermita de San Blas.
















Por suerte para este lugar, todavía se utiliza


el transporte animal.
















El grupo en la ermita.















Limite de provincia entre Salamanca y

Cáceres. Y al fondo el pico del Jálama.















Recuperando fuerzas.















Y abrevando también.















En este punto cogimos el antiguo camino

de Castilla.















Otra toma del camino.















Y otra más.















Al fondo la presa del Prado de las Monjas.















Hay un antiguo dicho que dice; que el que

encuentre el lugar exacto donde el

Arco Iris toca el suelo, en ese mismo punto,

encontrara un gran tesoro.















Así que la gente iba en su busca.















Cada vez más deprisa.















Descendiendo hacia el arroyo de la Jara.















Panorámica.















Otra panorámica de la presa del

Prado de las Monjas.















Tiempo para el avituallamiento.















Después de una buena comida.

Bien viene un buen café.















Aún hoy en día todavía quedan apicultores

a la vieja usanza. Utilizando los corchos

para sus colmenas.















El grupo disfrutando del entorno.















Beee......















Antigua era para trillar. Algunos piensan que

puede ser un antiguo vestigio Ibero.















La edad del pavo hace tiempo que se os paso.

¡Ya sois mayorcitos para poner caritas!















El padre prior en su disertación de la tertulia,

los tenía embelesados a más de uno y una.


























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